Así como señalamos cuando hay errores, hay que reconocer cuando las Instituciones hacen bien las cosas.
Tal vez el nombre de Orlando Javier Rincón Reyes no les diga nada, pero es el lateral que logró el ascenso con el Puebla de la Franja en 2007 y con Lobos BUAP en 2017.
Y si de algo sabe bien Orlando es de fútbol. Es un apasionado que vive y sueña con este deporte.
El ex jugador es ahora el encargado del Centro de Formación Deportiva de la BUAP, donde se ha concentrado en una formación integral con los niños y jóvenes que sueñan con jugar de manera profesional.
Además, las estadísticas no mienten: tan sólo en el Campamento de Verano, el número de inscritos se duplicó en sólo un año.
Los papás están felices ya que los muchachos alcanzaron un mejor nivel con la renovación del sistema de entrenamiento técnico-táctico, que implementó Rincón Reyes.
La cereza del pastel la puso César Eduardo Cercado Luna “el loco”, ex jugador de Lobos con más de 250 partidos como profesional, quien se incorporó en la categoría de 13 a 15 años.
Sin tantos reflectores, trabajando, los del Cefor BUAP la están rompiendo.