El boxeo se dio a conocer como un deporte de alto riesgo debido a los golpes que se reciben arriba del ring, lo que se volvió a demostrar en Filipinas cuando una promesa de 22 años de edad perdió la vida a pesar de que ganó su última pelea y fue apoyado por Manny Pacquiao.
Fue el 10 de mayo cuando las cuentas referentes al pugilismo informaron que Kenneth Egano, quien fue considerado como una de las principales perlas del deporte, perdió la vida después de las lesiones sufridas durante el combate en el que terminó con la mano en alto.
Fue el 6 de mayo cuando el peleador de peso gallo enfrentó a Jason Facularin en una contienda a ocho rounds en el Imus Sports Gymnasium en Imus, de su país natal, donde, después de que se completaron, sufrió una hemorragia cerebral que lo dejó en coma.
A pesar de que el boxeador de Filipinas terminó en pie la pelea, fue mientras esperaba la contabilización de los jueces cuando se desplomó en su esquina, lo que provocó que su equipo de trabajo se preocupara y llamaran rápidamente al personal de salud para que lo atendiera.
Al hacerse viral este caso, el propio Manny Pacquiao, quien tiene un puesto político en la nación, decidió apoyar a la familia de Kenneth Egano en todos los gastos médicos, esto debido a que, según sus palabras, “no hay nada más preciado que la vida misma”.