Con todo y las órdenes de que no se prescriban los medicamentos que no tienen disponibles en farmacias del IMSS, el Gobierno federal admite que ha dejado sin surtir casi 45 millones de recetas en el sector público durante este sexenio.
En medio de reiteradas negaciones de desabasto de medicamentos y acusaciones de que se trata de una “campaña mediática”, el Gobierno tiene registro oficial de un aumento anual de recetas sin surtir.
Las cifras oficiales, difundidas en la conferencia del Presidente Andrés Manuel López Obrador el pasado miércoles, supuestamente para desmentir los datos publicados por Reforma, confirman que desde 2018 suman 44 millones 923 mil 349 recetas sin surtir.
En 2018, último año del sexenio anterior, no surtieron 953 mil 919 recetas, que equivalen al 0.44 por ciento, pero en 2019, primer año del actual Gobierno, esa cifra subió a 4 millones 40 mil 692, el 1.81 por ciento.
Para 2020 fueron 11 millones 325 mil 2 recetas, 5.92 por ciento, y en 2021 se alcanzó el máximo de 17 millones 119 mil 502 recetas sin surtir, el 8.7 por ciento del total.
En 2022 sumaron 10.3 millones y en lo que va de este año, en el sistema de salud público no se ha logrado surtir un millón 180 mil 436 recetas médicas, que representan el 1.92 por ciento.
En el informe oficial no se precisó si están incluidas también aquellas recetas que fueron surtidas parcialmente.
En junio de 2021, el subsecretario de Salud, Hugo López Gatell, aseguró incluso que las acusaciones por falta de medicamentos, especialmente para niños con cáncer, eran una campaña de la “derecha internacional”, sostuvo.
En enero de 2020, AMLO negó que hubiera desabasto de medicamento, en especial para los niños con cáncer, que Reforma había revelado meses antes.
“No hay (desabasto)… y no va a haber nunca falta de medicamentos”, afrimó el 23 de enero de 2020.
Hace una semana se publicó que el Colectivo Cero Desabasto ha documentado que se dejaron de surtir 22.8 millones de recetas tan sólo en 2022, cuando en 2017 fueron apenas 1.7 millones.
Además, ayer se reveló que médicos del IMSS en hospitales de Nuevo León reciben prácticamente todos los días órdenes de sus jefes vía WhatsApp para no recetar medicamentos que no han sido abastecidos y se evite así un efecto negativo en las estadísticas oficiales federales.
Desde el primer día de su sexenio, en su lista de 100 compromisos de Gobierno, AMLO prometió para 2021 medicamentos gratuitos y un sistema de salud como el de Canadá o los países nórdicos.
El pasado 15 de abril, en gira por Oaxaca, AMLO admitió que ha incumplido su promesa de un sistema de salud como en Dinamarca, pero aseguró que dejará uno mejor que el de esa nación.
Arrastra México atraso en salud
La inversión en salud de México llegó a un nivel de 5.4 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), cifra que ubicó al País por debajo de la media de los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) y en los últimos lugares de Latinoamérica y el Caribe.
De acuerdo con el informe Panorama de la Salud Latinoamerica y el Caribe 2023, publicado por la OCDE y el Banco Mundial, el País sólo supera a naciones como San Kitts y Nevis y Venezuela, con 5.3 por ciento cada uno; Perú, con 5.2 por ciento; Granada y Guyana, con 4.9 por ciento, y San Vicente y las Granadinas y Haití, con 4.7 por ciento.
En los dos últimos lugares de la región quedaron Antigua y Barbuda, con 4.4 por ciento, y Santa Lucía, con 4.3 por ciento.
El reporte estableció que Cuba es la nación de la zona que más invierte en salud, con un 11.1 por ciento de su PIB.
Le siguen Surinam, con 9.7 por ciento; Brasil, con 9.6 por ciento; Argentina, con 9.5 por ciento; Uruguay y Chile, con 9.3 por ciento; El Salvador, con 8.5 por ciento; Nicaragua, con 8.4 por ciento; Colombia, con 8.1 por ciento; Ecuador; con 7.8 por ciento; Panamá, con 7.5 por ciento, y Honduras y Costa Rica, con 7.2 por ciento.
El promedio de la OCDE es de 8.8 por ciento del Producto Interno Bruto de gasto en salud, mientras que la región de América Latina y el Caribe alcanzó un promedio de 6.8 por ciento.
La inversión en salud resulta de la suma del gasto en servicios totales del rubro, bienes médicos entregados a pacientes externos, servicios públicos de salud, administración de salud y seguros médicos.
El informe de la OCDE, publicado la semana pasada, estableció que existe una amplia variación en los niveles del gasto per cápita en salud en la región y señaló el caso de Haití, con 143 dólares, mientras que Cuba canaliza dos mil 548 dólares.
En este rubro, México destina mil 117 dólares, quedando por debajo del promedio regional de mil 155 dólares y los tres mil 999 dólares de las naciones integrantes de la OCDE.
“En promedio, el 60 por ciento del gasto en salud en los países de América Latina y el Caribe proviene del Gobierno y de los planes de seguro obligatorio, mientras que el 40 por ciento restante está cubierto por pagos particulares, esquemas de pagos voluntarios y recursos externos”, estableció el informe.
“Por el contrario, el Gobierno y los planes de seguro obligatorio en los países de la OCDE son responsables del 77 por ciento del gasto en salud”.
En la región, estableció el documento, la tasa de crecimiento del gasto en salud per cápita fue de 4.9 por ciento anual en promedio en Latinoamérica y el Caribe entre 2010 y 2019, cifra superior al 3.1 por ciento observado para el Producto Interno Bruto.
La OCDE indicó además que los sistemas de salud sufren de escasez de recursos, pues en la región existe un promedio de dos médicos, 3.5 enfermeras y 2.1 camas hospitalarias.
Con información de reforma.com