Como en todo el país, el partido del presidente encabeza todas las encuestas en Puebla rumbo al 2024. La única opción que tendría Acción Nacional, si realmente quiere competir, es Eduardo Rivera Pérez, aunque ya hay voces que aseguran que él y su equipo buscarán repetir en el Municipio.
No les conviene una guerra de ese tamaño en estos momentos.
Como un mal chiste, en la baraja del PAN aparecen figuras como el impresentable Javier Lozano Alarcón, la incongruente Ana Tere Aranda, el gris Humberto Aguilar y hasta el morenovallista Jorge Aguilar Chedraui.
Del casi muerto PRI, sólo figuran la eterna candidata Blanca Alcalá y el diputado Jorge Estefan, sin ninguna oportunidad.
En la última medición de Demoscopia Digital, realizada en septiembre de este año, Morena aventaja al Partido Acción Nacional por 15.7 puntos.
Lo mismo pasa si se concretan las alianzas o coaliciones: Morena, PT y Verde aplastarían a Va por México -si no se alía el Revolucionario Institucional a López Obrador para mantener el registro en el estado- por 17.5 puntos.
Hay que decirlo claro: la oposición (sí hay, por si no parece) no tiene oportunidad de recuperar la gubernatura.
Lo realmente interesante es, ¿quién será el candidato de Morena en la entidad?
Según la misma encuesta, Alejandro Armenta supera -y por mucho- a todos los aspirantes de su partido: tan sólo a Gabriel Biestro, su más cercano perseguidor, le saca 16.6 puntos de diferencia; a Salomón Céspedes 17.7 puntos; y a Nacho Mier, Olivia Salomón, Melitón Lozano y Claudia Rivera Vivanco, más de 20 puntos.
Aunque en los careos y si los priistas y panistas eligieran por una encuesta, cualquiera de los candidatos morenistas derrotaría a Lalo Rivera y Blanca Alcalá.
La decisión en lo más alto del poder no se basará en quién puede ganar, sino en quién puede aplastar y sumar votos para la presidencial.
Ahí sólo hay un nombre: Alejandro Armenta Mier, dueño de una estructura en todo el estado, pero también de un pasado marinista lleno de sombras y conspiraciones.
Y es que Armenta no tuvo que esperar tanto para tener su oportunidad. El hoy senador estaba en los planes que el ex gobernador Marín y su grupo presumían : Zavala en 2012, Armenta en 2018 y Mario Junior en el 2024.
Y es que el poder, el maldito poder vuelve locos a muchos. Igualito que los marinistas, los morenovallistas soñaron con gobernar el estado por décadas y hoy están casi extintos.
Pero volvamos al caso del senador.
Desde la Mesa Directiva del Senado, Armenta sabe que no tendrá una oportunidad similar para ser gobernador.
Así que ya ha planteado dos escenarios a sus más cercanos: candidato por Morena o candidato por Movimiento Ciudadano, partido con el que ya ha tenido acercamientos rumbo a la elección.
De la mano de MC, difícilmente le alcanzará para ganar, pero sí para desestabilizar a su actual partido y cobrar factura. Esto daría una oportunidad a los panistas de lograr lo inimaginable: regresar a lo más alto del poder político en Puebla.
Armenta va porque va. Avisados están.
Aquí pueden consultar el estudio completo: https://bit.ly/3FxvWr6
Para mentadas, datos, ofensas, denuncias: 221 590 5837.