Durante la Comisión de Igualdad Sustantiva del Ayuntamiento de Puebla, colectivos feministas expusieron los retos que enfrentan las mujeres para realizar un aborto seguro.
Cinthia Ramírez, integrante de ReDefine Puebla, explicó que han buscado acercamiento con los diputados del Congreso de Puebla para mejorar la atención en los hospitales públicos, principalmente en la capacitación y sensibilización al personal de salud.
“Las atenciones se centran en Puebla capital, pero no solo lo hacen las mujeres de Puebla capital, sino también en otros municipios”, comentó.
Además de quitar mitos o creencias sobre que la mayoría de las mujeres que deciden a abortar son mujeres jóvenes.
A un año de la despenalización del aborto, 388 mujeres decidieron interrumpir su embarazo a través del programa de los sistemas de salud.
Destaca que personas trans, indígenas y con discapacidad han decidido no seguir con la gestación.
“Hemos encontrado que personas con discapacidad han estado abortando, con inmovilidad, trans y también indígenas. Por eso es importante la sensibilización para que el médico las trate de la mejor forma”, comentó.
El 15 de julio, el Congreso de Puebla aprobó la legislación del aborto para que sea seguro en hospitales públicos.
Cinthia Ramírez, integrante de ReDefine Puebla reveló que, aunque se cree que vivimos en un “estado conservador”, son las mujeres católicas las que han decidido no continuar con su embarazo.
Ante esta situación, informó que el municipio de Puebla debería de realizar campañas sobre el aborto seguro y la prevención de embarazo adolescente. Además de dar capacitación a funcionarios para la atención de víctimas de violencia sexual.