Para que los trabajadores puedan beneficiarse del aguinaldo doble, deben cumplir con ciertos requisitos. Entre ellos, tener un contrato laboral vigente y contar con las prestaciones establecidas por la Ley Federal del Trabajo. Esta ley estipula que un empleado debe tener al menos un año de antigüedad para recibir el aguinaldo completo, aunque los nuevos empleados recibirán un pago proporcional al tiempo trabajado.
El aguinaldo es una prestación obligatoria que debe pagarse antes del 20 de diciembre de cada año. Este pago es esperado por los trabajadores con particular interés, ya que les permite afrontar los gastos de fin de año. La posibilidad de recibir un aguinaldo doble podría aliviar la presión financiera de muchas familias, pero también plantea desafíos para las empresas, que deberán ajustar sus presupuestos para cumplir con esta obligación.
La discusión sobre el aguinaldo doble no solo se centra en su viabilidad económica, sino también en su impacto social. Los defensores de la medida argumentan que podría reducir la desigualdad y mejorar la calidad de vida de los trabajadores. Sin embargo, los críticos advierten sobre el riesgo de que las empresas, especialmente las pequeñas y medianas, enfrenten dificultades financieras para cumplir con el pago adicional.
Por ahora el futuro del aguinaldo doble en México depende de un delicado equilibrio entre las necesidades de los trabajadores y las capacidades de las empresas. La decisión final del Congreso de la Unión será definitiva para determinar si esta propuesta se convierte en una realidad o permanece como una aspiración. Mientras tanto, millones de trabajadores esperan con expectativa el desenlace de esta importante discusión legislativa.