La ex diputada federal Violeta Lagunes hizo menos la amenaza de Augusta Díaz de Rivera que como dirigente estatal del PAN tendrá que expulsar a más de 500 militantes que se están sumando a Morena en los proyectos por la gubernatura de Alejandro Armenta y en la capital con José Chedraui.
La panista incluso se mofó y dijo que “no le alcanzará su gestión” para expulsar a todos por lo que sugirió que “le chingue”.
“Yo le diría a ‘Tití’, chíngale, apúrate a iniciar los procesos porque no somos 500, somos más, no te va a dar tiempo”, dijo.
También recordó que tiene anomalías en la aplicación de recursos en el partido y “no vaya siendo que termine en la cárcel por los desvíos”, que probablemente tenga su gestión.
Acompañada de Jesús Giles, señaló que se clasifique a “panistas de primera, de segunda y de tercera” solo por no simpatizar con “el Yunque” el grupo que actualmente tiene el partido.
Incluso parece que la actual dirigente desconoce la dirigencia del partido y que son las bases quienes integran la composición del padrón de militantes en la capital.
“Pareciera que si no eres parte de las familias custodias del Yunque no tiene voto, voz ni peso”, reprochó.
Confió en que el proceso en su contra no aplique y aclararon que no figurarán con cargos públicos con Morena, en caso de ser beneficiados en el proceso electoral.