Mujeres originarias de Centroamérica denunciaron que ellas y sus familias fueron víctimas de una emboscada y agresiones por parte de agentes del Instituto Nacional de Migración (Inami).
Ello en el paso de la caravana migrante de la que formaban parte, la cual estaba integrada por más de 300 personas.
Acusaron que los agentes de la dependencia federal las golpearon y separaron de sus hijos, además de propinarles descargas eléctricas y violentar sus derechos humanos.
Una de las afectadas dijo entre lágrimas que no conoce el paradero de sus vástagos y mencionó que a su esposo “le reventaron la boca”.
Otra de las víctimas manifestó que fueron acorralados por elementos del Inami y los hicieron caminar hasta una zona considerada de alto riesgo o foco rojo de inseguridad en el estado.
Cabe agregar que por parte de la dependencia federal solo existe un comunicado del pasado 2 de febrero, en el que se destaca “el rescate humanitario” de 2 mil 500 personas de 36 nacionalidades distintas en la entidad poblana.
No obstante, la numeralia en cuestión solo obedece a las estadísticas registradas por el Inami en el mes de enero del año en curso.
Sobre el suceso denunciado por mujeres centroamericanas, no existía un pronunciamiento hasta el corte de esta publicación.