El Tren Maya está transformando el sureste de México con su infraestructura ferroviaria moderna, diseñada para estimular el desarrollo integral de la región. Este ambicioso proyecto no solo mejora la conectividad con 24 estaciones operativas, sino que también potencia el sector turístico, atrayendo a miles de visitantes nacionales e internacionales a sitios naturales y culturales de gran interés.
Durante la conferencia matutina del presidente Andrés Manuel López Obrador, el director general del Tren Maya, Óscar David Lozano Águila, destacó los atractivos del tramo uno, que va desde Palenque hasta Escárcega. Los usuarios tienen la oportunidad de explorar maravillas como las zonas arqueológicas de Yaxchilán y Bonampak, las impresionantes cascadas de Agua Azul y el centro turístico Cascada Misol-Ha en Palenque, Chiapas.
La estación Boca del Cerro ofrece acceso a la zona arqueológica de Pomoná y al cañón del Usumacinta, mientras que desde Tenosique, Tabasco, los visitantes pueden explorar las cuevas del Tigre, del Zorro y de las Golondrinas. Además, la reserva de la biosfera Wanha’a es accesible desde la estación El Triunfo, y la estación Candelaria conecta a los turistas con la zona arqueológica “El Tigre” y el parque urbano “Salto Grande”.
El Tren Maya no solo está promoviendo el crecimiento económico y la creación de empleos en la región, sino que también está posicionando al sureste de México como un destino turístico de primer nivel.