El gobernador Sergio Salomón Céspedes Peregrina expresó su respaldo a la Ley Ociel Baena, que es impulsada por colectivos de la diversidad sexual en Puebla para contrarrestar discursos de odio.
No obstante, lamentó que ese tipo de violencia tenga que ser regulado por medio de instrumentos jurídicos y no por voluntad propia de la ciudadanía.
“Si es necesario adelante, pero que lástima que tenga que ser por leyes y no por el respeto a las personas”, manifestó.
Por otra parte, condenó el actuar del regidor panista, Miguel Ángel Mantilla, quien se niega a tomar los cursos de nuevas masculinidades que le instruyó el Ayuntamiento de Puebla luego de agredir verbalmente a un colaborador de Elisa Molina Rivera, regidora de Morena.
“El actuar de cada uno de los funcionarios es un tema de responsabilidad propia, pero hay que saber que una vez que uno asume un cargo tiene obligación de cumplir el respeto a los derechos humanos”, sostuvo.
Es oportuno recordar que la Ley Ociel Baena propone sanciones para los servidores públicos y personas que promuevan discursos de odio hacia la comunidad LGBTTTIQ+.
Lo anterior en virtud de que son considerados la antesala de los asesinatos contra integrantes de la diversidad sexual.
También establece que, en caso de crímenes de odio, las autoridades encargadas de ellos deben actuar con perspectiva de género.