Lo del América comienza a ser preocupante y lo de Fernando Ortíz insostenible. No son los resultados los que molestan al americanismo, son las formas y las malas sensaciones que deja el equipo dentro del terreno de juego.
Partiendo por la portería, que sigue generando muchas dudas. Óscar fue importante en el primer partido, pero dejó un mal sabor en los dos siguientes. Ha sido señalado —y con razón— por una afición que pide a gritos una oportunidad para Malagón.
Es fácil: un portero que llevaba 5 años siendo suplente, no puede asumir la titularidad de un equipo que está acostumbrado a tener los mejores guardametas de la liga como lo fueron Ochoa y Marchesín en su momento.
Aunque no todo es culpa de Jiménez, la defensa del América es TERRIBLE. La pelota parada es el punto más débil del equipo y lo peor es que el ‘Tano’ ha probado con alineaciones diferentes en los tres partidos y en todos ha sido exhibido por el rival.
Sin Bruno, Layún o Fuentes para culpar, es claro que el técnico tiene un alto grado de responsabilidad por todas las carencias que muestra el equipo en zona baja. Lo peor es que en lugar de mejorar, partido a partido lucen peor.
El ejemplo más claro es Israel Reyes que el torneo pasado fue el mejor en sus posición y bajo la dirección de Ortiz simplemente no se encuentra en el campo. Y lo mismo sucede con Diego Valdés, Fidalgo o el mismo ‘Cabecita’.
Entiendo que es jornada tres, pero que Gallos y Puebla —dos de los peores equipos en la Liga MX— te saquen puntos en casa, es inadmisible. No me quiero imaginar lo que será contra Tigres, Monterrey o Pachuca. Hay que recordar que, por menos, ‘echaron’ a Santiago Solari.
El discurso tiene fecha de caducidad. El ‘Tano’ no puede pedir paciencia a una afición que lleva años sin ganar un título de Liga y menos cuando el equipo empeora jornada tras jornada.
Es muy claro que jugando así, no hay posibilidad alguna de levantar la ‘14’. Se extraña aquel América donde no había pretextos y la exigencia de ganar era máxima.
En fin, después de lo visto al día de hoy, me parece que Santiago Baños tiene que dar un golpe sobre la mesa y contactar el teléfono de Antonio ‘Turco’ Mohamed, un técnico que sabe lo que es salir campeón con el América y con un equipo que era mucho más limitado que el actual.