El presidente municipal de Puebla, Eduardo Rivera Pérez, se volvió a ausentar este viernes de su evento gubernamental que realiza todos los días.
En su lugar envío al gerente municipal, Adán Domínguez Sánchez, quien evadió responder a fondo algunos temas.
Lo anterior, para evitar que el alcalde panista se expusiera ante los medidos de comunicación y la sociedad, sobre el conflicto que sucede en la Central de Abasto, y la exigencia de familiares de los cuatro asesinados en San Francisco Totimehuacán.
Los deudos de los ejecutados exigen que el presidente municipal ofrezca una disculpa pública, luego de que los calificó como crimínales y narcomenudistas, sin embargo, las autoridades estatales han descartado tal actividad, aunque las investigaciones continúan.
Además, desde la tarde de ayer jueves 1 de diciembre y hoy viernes, se han generado conflictos entre comerciantes de la Central de Abasto e integrantes de la organización 28 de Octubre.
El enfrentamiento no ha podido ser solucionado por parte de Gobernación municipal, ni la dirección de Mercados.
Al respecto, se le cuestionó al gerente, Adán Domínguez, quien se limitó a decir que el Ayuntamiento solo está siendo mediador.
Respecto a la exigencia de los familiares de asesinados en Totimehuacán, que piden una disculpa pública, el funcionario municipal subrayó que la Fiscalía General del Estado (FGE) es la que está llevando las investigaciones.
¿El Ayuntamiento haría una disculpa pública como lo piden los familiares?, se le interrogó
“Insisto, la FGE es la determinada para señalar a los responsables al respecto”, contestó.
Esta no es la primera vez que Rivera Pérez se esconde para evitar cuestionamientos respecto a los problemas sociales.
Anteriormente, también se ausentó de un evento cuando previamente alumnos de la BUAP se manifestaron en Palacio Municipal exigiendo justicia por dos jóvenes detenidos con brutalidad por parte de elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC).