La Cámara de Diputados instaló este lunes la comisión de trabajo para el análisis de la iniciativa para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales, con la participación del sector empresarial, organizaciones sindicales y gobierno federal.
Los legisladores manifestaron su compromiso dar trámite a la propuesta antes de concluir el próximo periodo de sesiones, en abril de 2024.
Al dar la bienvenida a los participantes, el presidente de la Jucopo, diputado Jorge Romero Herrera, afirmó que todos los grupos parlamentarios de la Cámara de Diputados quieren ayudar a la clase trabajadora, y nadie podría desear algo distinto, por lo cual en este espacio de diálogo “tenemos que ponernos de acuerdo en cómo hacerlo de una manera en donde salgan ganando todos, tanto la parte empleadora como la parte trabajadora”.
Subrayó que en la discusión que se dará se deben tomar en cuenta a las empresas que tienen uno o dos trabajadores, para no generar una legislación que acabe siendo contraproducente; “que prosiga esta mesa de trabajo para que en el próximo y último periodo de sesiones de esta LXV Legislatura sea un tema sí o sí, ése es un compromiso que también lo estamos haciendo público y esperando que lleguemos a ese acuerdo”, finalizó.
Al hablar a nombre del grupo parlamentario de Morena, el diputado Ignacio Mier Velazco dijo que nadie está en contra de lograr la reducción de la jornada laboral, pero también es necesario que se adviertan todas las aristas que tienen que ver con este cambio constitucional, a fin de lograr “construir una reforma que lleve la opinión técnica, jurídica y económica de todos los sectores que participan en el proceso laboral, incluida la voz de los trabajadores para que los representantes en el Pleno podamos votar de manera unánime”.
Por parte del PAN, el diputado Santiago Torreblanca Engell destacó que su grupo parlamentario está a favor de reducir la jornada laboral y exige no moverle una sola coma al dictamen, pero ello, dijo, llevaría a que la reforma no se apruebe. En ese sentido, se pronunció por realizar un cambio como el que se hizo en Chile, un diálogo tripartita, con una gradualidad y conociendo a cada uno de los sectores, “para lograr una reforma laboral justa y equilibrada en el siguiente periodo legislativo”.
En representación del PRI, el diputado Tereso Medina Ramírez señaló que comparten la idea de que en este espacio nadie puede estar en contra de los trabajadores; subrayó que la tarea de esta Legislatura es analizar e intercambiar ideas y propuestas, no protestas. “Le apostamos a que en este ejercicio de diálogo dejemos a un lado cualquier interés personal, sectorial, de grupo o de partido, y que veamos los auténticos y verdaderos intereses de la nación”.