Una vez que comenzaron las campañas oficiales, candidatos a las dirigencias de las secciones 23 y 51 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) en Puebla, se pronunciaron por debates, evitar la guerra sucia y negaron ser el “delfín” del magisterio.
El primero que se pronunció fue el aspirante a la presidencia de la 23, Víctor Ortiz, quien negó que sea la imposición que quiere poner el actual líder, Alejandro Ariza Alonso. Al ser cuestionado al respecto, argumentó que él es el aspirante de los consensos por parte de los maestros.
“Aquí hicimos ejercicios democráticos para formar nuestra planilla y para la definición del aspirante, no hay otro lenguaje. Nosotros recorrimos el estado”, defendió.
Posteriormente, se pronunció el contendiente a esta misma agrupación, José Luis González, de la planilla Caminemos Juntos. Durante el arranque de su campaña, el maestro dijo confiar en que habrá un proceso transparente.
Señaló que, de cara a los comicios del 28 de marzo, respetará a la dirigencia magisterial y a todos los aspirantes.
En este tenor, también salió a la opinión pública, el candidato a la dirigencia de la sección 51 del SNTE, Salvador Torres Castillo “el conta Chava”, quien se pronunció porque se desarrolle un debate entre los interesados.
En rueda de prensa, sostuvo que existe el tiempo suficiente y los recursos económicos para llevarlo a cabo. “Yo digo que un debate para que nos conozcan bien a todos, eso lo exige la democracia y que se tome la mejor decisión”, resaltó el docente.