El presidente Andrés Manuel López Obrador emitió un decreto que ordena transferir al IMSS-Bienestar seis hospitales federales de alta especialidad que pertenecían a la Secretaría de Salud.
Se trata de los hospitales regionales de alta especialidad del Bajío, el de Oaxaca, Yucatán, Ciudad Victoria e Ixtapaluca, así como del Centro Regional de Alta Especialidad de Chiapas.
A partir de este viernes, esas unidades médicas serán administradas por el nuevo organismo de salud, según establece el Decreto por el que se desincorporan por fusión el Centro y los Hospitales Regionales de Alta Especialidad que se indican con el IMSS-Bienestar.
Lo anterior significa que los recursos humanos, presupuestarios, financieros y materiales de los hospitales de especialidad también serán gestionados y transferidos al IMSS-Bienestar.
De los seis hospitales que se fusionarán con el nuevo organismo sanitario, tres fueron construidos bajo el esquema de asociación pública-privada (APP) durante sexenios pasados. Este modelo implica diseñar, construir, operar y mantener los hospitales con dinero privado a cambio de que el gobierno federal pague un monto anual por un tiempo determinado para cubrir el costo.
De esta manera, la operación de las unidades médicas APP, creadas como organismo descentralizado de la Administración Pública Federal, queda a cargo del gobierno y puede disponer de ellas, siempre y cuando cumpla los contratos celebrados con los privados.
Uno de estos hospitales es el Regional de Alta Especialidad del Bajío, ubicado en León, Guanajuto. El contrato de esta unidad médica de 247 camas se asignó en 2005 y establece que el gobierno pagará por su mantenimiento y operación un monto anual de 354 millones de pesos durante 25 años. A la fecha, quedan siete años vigentes de ese acuerdo.
También se decreta el traspaso del Hospital Regional de Alta Especialidad de Ciudad Victoria “Bicentenario 2010”, por el que el gobierno federal paga anualmente 531 millones de pesos desde 2007 y restan nueve años para concluir el contrato firmado por 25 años.
El otro hospital APP es el Regional de Alta Especialidad de Ixtapaluca, con un costo al año de 622 millones de pesos. El contrato inició en 2009 y duraría 25 años.
Antes de publicar el decreto, el presidente López Obrador informó que su gobierno busca adquirir los hospitales APP o renegociar los contratos.
“Estamos viendo cómo revisamos contratos o, de plano, adquirimos, compramos, 12 hospitales que hicieron empresas y le rentan al gobierno el servicio o el gobierno les paga por el servicio, pero son hospitales hechos por empresas y se les paga anualmente por el servicio”, explicó en la conferencia matutina del 13 de julio.
Con información de expansion.mx