La ciudadanía del Municipio de Puebla rechaza claramente el que se autorizara un aumento al costo del pasaje en el transporte público de la zona capitalina del Estado. El motivo lógico y fundamental es el pésimo servicio y el mal estado de las unidades de los concesionarios en todas sus rutas.
Esto es lo que nos demuestra la Encuesta de Percepción del Transporte Público que hemos levantado en el BEAP, S.C. a una muestra representativa de poblanos capitalinos, la semana pasada, con entrevistas cara a cara en todas las zonas de la ciudad y Juntas Auxiliares.
La Encuesta habla por sí sola, pero el resultado es contundente: Los poblanos están evidentemente en contra de que se autorizara un aumento al costo del transporte público y menos si llegara a los 19 pesos que proponen los líderes de los concesionarios. Naturalmente, eso no va a ser autorizado por el Gobierno Estatal.
La primera pregunta que hicimos fue: “En una escala del 0 al 10 (en la que 0 es pésimo y 10 es excelente) ¿Qué calificación le pone Usted al servicio de transporte público en la Ciudad de Puebla?”. El promedio de calificación fue: 4.08, o sea, realmente reprobado. Pero lo interesante es ver los motivos de cada nota numérica:
El 12.8% da 0 (cero) de calificación; 12.2% da 3 (tres); 14.9% da 4 (cuatro); 25.8% da 5 (cinco)… solo 2.7% da 8 (ocho); 1.1% da 9 (nueve) y nadie da 10 (diez).
Los motivos de las calificaciones reprobatorias son contundentes: Del 0 al 5, siempre es porque “las unidades están en mal estado”; porque “causan accidentes” o por los “malos conductores” (resto de menciones en tablas correspondientes).
Es clarísimo que la gente reprueba el pésimo servicio de los concesionarios del transporte público por esos motivos incuestionables e inocultables. Recordemos que la mayoría de ciudadanos de Puebla son o han sido usuarios del transporte público.
Y la siguiente pregunta fue la que nos da la realidad sobre el aumento al pasaje: “Actualmente, la tarifa del transporte público en la Ciudad de Puebla es de 8.50 pesos ¿Cuánto más estaría dispuesto a pagar si se diera un aumento?”. Las respuestas se acomodaron de la siguiente manera (se le dio al encuestado una lista de opciones):
El 54.8% dice que estaría dispuesto a pagar entre 10 y 12 pesos. Aunque el 32% dijo NO estar dispuesto a pagar ningún aumento. 6.7% dice que pagaría entre 12 y 15 pesos. 5.6% no sabe o no contestó la pregunta. 0.5% dice que podría pagar entre 15 y 18 pesos. Y solo 0.3% dijo que pagaría hasta 19 pesos.
La postura es clara, casi 90% (86.8%) dice no estar dispuesto a pagar un aumento o bien solo hasta 10-12 pesos.
Los resultados de la Encuesta son más que contundentes: La ciudadanía y usuarios no están a favor de que se aumente el costo del pasaje en forma arbitraria y mucho menos en los niveles que pretende la mafia de los concesionarios, por el pésimo servicio, malas unidades, malos conductores y causantes de accidentes.
Ojalá la autoridad estatal que comenzará sus funciones en una semana, tenga en cuenta lo que opina naturalmente la ciudadanía. Personalmente creo que sí lo hará, pues el Gobernador electo Alejandro Armenta sabe del tema y ya ha expresado su rechazo a los aumentos que exigen abusivamente los concesionarios.
Es cuanto, por el momento.