Desde hace más de un año, Capital ha documentado que hay lugares que carecen de licencia para funcionar como Cabaret, pero ofrecen sexo en sus instalaciones en la ciudad de Puebla. En mayo, el alcalde Eduardo Rivera Pérez afirmó que instruyó a Normatividad a revisar ese tipo de establecimientos, pero nada ha sucedido.
“Hay que tener mucho cuidado con este tipo de negocios, los que venden cerveza, alcohol, porque luego es ahí donde proliferan este tipo de conductas ilícitas o de manera irregular operan”, manifestó.
Como nunca antes en la historia de Puebla, podemos encontrar bares y restaurantes que operan como clubs nudistas.
La impunidad con la que se mueven estos negocios permite la venta de bebidas embriagantes adulteradas, shows de sexo en vivo, distribución de sustancias prohibidas, prostitución de menores y entrada a jóvenes sin la mayoría de edad.
Hoy, gracias a la intervención del Secretario de Gobernación, Javier Aquino, la propuesta de reforma al Código Penal de Puebla establece hasta 6 años de cárcel a quien venda, distribuya, suministre alcohol sin licencia o permiso fuera de los horarios establecidos, en bares, antros o cantinas.
Dicha iniciativa la envió el gobierno estatal al Congreso del estado para su análisis y posible aprobación.
El dictamen señala, incluso, que la pena subirá hasta los 9 años cuando se trate de menores de edad.
Los dueños de negocios deberán presentar a la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) un análisis del tamaño del establecimiento, donde también mencionen cuántos elementos de seguridad privada capacitados contratarán.
Sobre los horarios de estos establecimientos, se explica que bares y antros no podrán vender más alcohol a los clientes después de las 2 de la mañana, además de que 2:30 deberá estar cerrado el establecimiento.
De igual forma, debe existir un circuito cerrado de televisión con cámaras de seguridad, instaladas fuera y dentro del negocio, además de tener grabaciones de respaldo por 30 días.
La iniciativa subraya que la SSP y Fiscalía General del Estado, en caso de ser necesario, podrán ingresar a los establecimientos o pedir información en específico; de negarse, será causa de revocación o cancelación de licencia de funcionamiento.