Más de 100 congales sin licencia se abrieron durante las administraciones de los panistas de Eduardo Rivera y el sustituto Adán Domínguez.
Hay un cómplice: Enrique Guevara Montiel, ex director de Normatividad.
El famoso Huevo, su chalán Cristobal Sosa y Sergio Salinas se dedicaron a aperturar lugares que no contaban con los documentos necesarios para operar.
El área se convirtió en una red de extorsión que decidía qué negocio podría abrir y cuál no.
Un table dance, para poder presentar show de bailarinas, necesita una licencia de Cabaret como la que publico a continuación.
Y como ésta, sólo existen 10 y únicamente hay 6 refrendadas en la actualidad en la capital.
Son decenas los clubs que, disfrazados como bares o restaurantes, tienen shows de mujeres desnudas y sexo en vivo con total impunidad, donde se puede tener sexo por 4 mil pesos: Bonitas, La Catrina, Passion Night Club, Palaze Men´s Club, Touch Me; Bar Paris, The Jungle Men´s Club, VIP Gentlelmans Club, Angel´s Sports Bar, Tentación, Bar Lion´s, Qué nochecita, El Pecado, Don Guillén, Santa Fé, Las Cotorras, Luxor, Fun, etc.
Las cuotas para trabajar sin licencia van desde los 5 mil hasta los 20 mil pesos por establecimiento. Los encargados de recoger las ganancias en la mayoría de los lugares son Cristobal y Sergio Salinas.
Todo en cash.
Con estas entregas de dinero, la ciudad deja de percibir varios millones de pesos al año por concepto de refrendo de licencias. Y es que un botanero no paga más de 70 mil pesos por operar y el Cabaret llega casi al medio millón de pesos.
Por eso se promueven en redes y camiones impunemente y con la tranquilidad que les da el efectivo que entregan al Ayuntamiento panista.
¿Dónde está todo ese dinero?